Lo ideal es siempre tener un equilibrio entre lo que hacemos por el bien de otros pero sin descuidar tus propias necesidades.
Una forma de identificar si hay un desequilibrio te sugiero que pienses si:
- Dices que si a una petición aun cuando por dentro sientes que no quieres o puedes.
- Respondes llamadas, emails o cualquier solicitud NO urgentes a altas de la noche para ayudar a otros.
- Sientes que te sacrificas por otros.
- Cuando tu necesitas ayuda, por lo general son pocos los que se ofrecen o terminas resolviendo tu misma la situación.
- Para ti es lo mismo ser necesitada que amada.
Si te identificas con lo anterior, es necesario empezar a evaluar tu visión del amor hacia los demás y hacia ti mismo. Recuerda que no puedes dar a otros lo que no te das a ti mismo, puesto que si lo logras, será desde una visión distorsionada y poco sana que a la larga, te traerá sufrimiento. Deja tu comentario y comparte en tus redes sociales, hasta la próxima :)