Existe una historia que dice que un niño, hablando con su abuela, escucha de ella que en su interior està el espìritu de dos lobos que viven y luchan entre sì. *Uno es vengativo, el otro amoroso y seguro de si mismo. El niño le pregunta ¿cuàl ganarà?. La respuesta fue: Al que yo alimente.
Esas dos fuerzas viven en nosotros, y, desgraciadamente, tendemos a alimentar la que nos hace daño. Las creencias limitantes de nuestros miedos tienen raìces profundas, asì que es necesario afrontarlas. Salirnos de nuestra oscuridad para conectarnos con nuestra luz.
Cuando vez a un niño, te puedes dar cuenta que venimos al mundo con la capacidad plena de amar, y saber ser merecedores de amor. Sin embargo, aprenden de nosotros lo contrario. Sin embargo, eso no significa que la capacidad de amar, esa luz haya desaparecido. Los temores son aprendidos, por lo tanto, podemos "desaprenderlos".
Mira a tu alrededor, ¿dònde se refleja la energìa del amor en tu vida? No solo busques en detalles grandes, a veces en los pequeños la vida te irradìa el amor.
Solo hay que aprender a ver...